Ultimamente todos los medios en los que nos encontramos se han vuelto mas ruidosos que nunca. Tanto en el trabajo como en la familia, el ambiente se ha vuelto lleno de acumulación no solo física sino de emociones y también de información.
Hace unos años todos teníamos Facebook y aprecia que todos debían estar al tanto de lo que pasaba en esa red social. Ahora que existe una cantidad de información 5 a 10 veces mayor; estamos rodeados de blogs, podcasts, perfiles de twitter, Instagram, canales de Youtube, medium y varios fuentes más de información.
Empezamos a sentir que hay demasiada información y no alcanzamos a adquirir todo lo que está ahí afuera para nosotros. La solución que muchos tenemos es hacer scroll más rápido a travez de nuestros feeds para poder alcanzar a ver todo lo que hay ahí afuera.
Entendamos que no es necesario estar constantemente revisando nuestras redes sociales. Demonos cuenta que únicamente son herramientas para poder cumplir lo que queremos. No estamos en una carrera por abarcar información, no estamos en una carrera por alcanzar a saber todo y por llegar a hacer toda actividad que se cruza en nuestro camino.
Demonos permiso para ir más despacio. Disfrutemos un poco más el proceso de lo que sea que tengamos pensado hacer. Es algo que me he propuesto y que cada día trato de hacer, porque me pasa a mi y a muchos lectores que me escriben que llegamos a un punto en el que estamos haciendo lo que supuestamente soñabas hacer pero no lo disfrutas porque estamos pensando en “la siguiente cosa que hacer” o el “siguiente sueño”.
No quiero decir que es malo ver al siguiente objetivo pero al parecer nos olvidamos de disfrutar lo que hacemos, de celebrar nuestras victorias y abrazar nuestros procesos.
Apreciemos un poco más todo.